NACER NO PIDE, VIVIR NO SABE, MORIR NO QUIERE. Tres Caras del Hombre.

sábado, 9 de julio de 2011

a la distancia de tres alientos serenos y profundos...

... está la paz.

La paz necesaria para volverse más observador y menos actor
la paz suficiente como para sosegar impulsos innecesarios
la paz capaz de relajar toda contracción.

Y si debemos partir, bueno, al menos lo haremos más lúcidos, con una mejor irrigación y oxigenación cerebral. Nos iremos más calmos con un corazón más tranquilo, y...
partiremos mas observadores sin tanto afán de actuar.

Si por casualidad cabe, hay ganas y dá seguir más allá de tres alientos serenos y profundos...
bueno, más allá, contarlo resulta insignificante.

Haga Usted la prueba y compruebe gozando sentir la Vida pasar por Usted

La llave

Nota:
los invitamos a visitar www.lailuminacion.com

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